Desde diferentes lugares, 09 de abril de 2020

Para un colectivo que ya parte de situaciones muy frágiles, la crisis actual sólo hace que agravar esta fragilidad. Hay familias de nuestra escuela que están teniendo muchas dificultades para cubrir las necesidades básicas. Hemos triplicado las becas gracias a la iniciativa de la Fundación Àurea para entregar alimentos a domicilio a aquellas familias con más dificultades.

Desde hace años, gracias a financiación propia y privado, El Llindar tiene abierto un programa de becas que ayudan a cubrir las necesidades básicas del alumnado que más lo necesita: alimentación, higiene, e incluso pago de alquileres y consumos.

La inclusión social de los adolescentes y jóvenes de El Llindar pasa por volver al sistema formativo reglado o entrar en el mercado laboral en mejores condiciones. Ahora bien, no tener cubiertas las necesidades básicas les impide sostener las formaciones que se les puede ofrecer. Intentar sobrevivir pasa a menudo por aceptar trabajos esporádicos, poco cualificadas y mal retribuidas, que impiden seguir una formación regularmente. En otros casos, deben asumir excesivas cargas familiares. Al final, la mayoría abandona su itinerario formativos, ya que éste pasa a un segundo plano.

Romper esta espiral requiere facilitar el acceso y el aprovechamiento de la formación. Para que esto sea posible se hace imprescindible garantizar las necesidades más básicas (alimentación, higiene, pernoctación …). En definitiva, apostar por apoyar el presente de estos chicos y chicas, para que ellos y ellas se hagan cargo de su futuro.

Sin embargo, el programa de becas de El Llindar está limitado a la financiación disponible y la demanda de ayudas se ha triplicado en el último mes. Afortunadamente, nos hemos podido sumar a una iniciativa de la Fundació Àurea que nos ha permitido dar respuesta a esta. necesidad.